En el desván, entre baúles,
polvos y trastos viejos: tus besos;
esos que me negaste;
esos que rozaron mis labios;
esos que se escondieron
entre el cerro y una ventana
colgando del viento;
esos que navegaron en silencio
entre estrellas muertas;
esos que decidieron
esconderse de mi pasión;
tus besos, ¡cómo extraño tus besos!