miércoles, 27 de noviembre de 2013

LIBERTAD ES SU LEMA



Tienes tanta libertad,
que no te queda
ni un poquito de prisión
para retenerme...

Sólo me queda volar,
a ver si por ahí... 
nos encontramos.



martes, 26 de noviembre de 2013

ME DECLARO CULPABLE



Me declaro culpable... soy un romántico.
No paso por alto nuestras manos entrelazadas;
no paso por alto tus labios en los míos;
no dejo de escuchar mi latidos cuando estás cerca mío.

Me declaro culpable... porque sueño contigo.
Y tu aroma me lo trae el viento,
y con el viento llegas a estar conmigo,
y traes contigo toda tu vida, esa vida que me encanta.

Me declaro culpable... si alguna vez te he mentido.
Si alguna vez ha parecido que no me importas;
si he callado lo que siento, si no he estado por momentos
porque siempre creo que ya has partido.

Me declaro culpable... de escuchar una canción,
y querer bailarla contigo.



domingo, 24 de noviembre de 2013

LA LOCURA DE NICOLE

La locura está en mi ojos y en los tuyos, 
está en el aire y en el viento (que no son lo mismo), 
en el agua que se parece al vino.

Tu locura y la mía, tan juntas y tan divididas, 
tan cercanas y olvidadas,
tan planas y onduladas.

Tus locuras y las mías que nacieron para ser escritas y recordadas... 
y cantada en los corazones de los amantes a escondidas. 

Tu locuras y las mías, serán nuestras en tanto seas mía. (A Nicole)


viernes, 15 de noviembre de 2013

LA IDEA DE AMARTE


Siembras el deseo
y no te quedas un tiempo
a ver cómo crece.
No sé si tu esencia es volar
o tan sólo huir.
Te sentí cómoda en mis labios.
Tu mano en mi pecho
y una sonrisa escondida
en la comisura de tu boca
le hablaron a mi corazón dormido,
y entonces te vi,
y entonces se instaló en mi
la idea de amarte.


COMO SE NOS HA MANDADO


No es porque seas linda,
o porque seas flaca,
o porque te muevas como una diosa
saliendo del agua,
o porque tu pelo negro azabache
huela a coco...
no es por eso que mi corazón piensa en ti;
es porque, como una walkiria
me robaste un beso desde mi cabalgadura
y me dijiste que era tu novio
y el cielo cambió de color
y el aire fue un cobertizo
y mi caballo me cerró un ojo
y mi hija escribió una sonrisa en su corazón
y la tuya me llamó papá
y sentí de nuevo el calor que me recordó
a qué vinimos a este mundo,
a vivir la vida como nos lo han mandado,
yo de tu mano y tu de la mía.


UN CAFÉ






Un café sirve para el frío;
sirve para decirse aquellas cosas
que quedan entre líneas.
Un café es la excusa ideal 
para mirarse a los ojos y explicar
todo aquello que no logras entender.

Un café es la excusa perfecta para pedir disculpas.
Es el momento ideal para decir: "no eres tú, soy yo"
Es el instante en que se reconoce el SER
como gestor de sus propios deseos
y se descubre a la mente como la conspiradora
de expectativas románticas.

Un café es lo que aun cabe
cuando uno cree que la vida esta llena de cosas.
Un café sirve incluso para decir adiós
y aun así seguir amando.

Un café, por último, es un instante maravilloso
para perderme en la magia de tus ojos,
y encantarme con la danza de tus labios.

Un café entre tu y yo 
es el espacio ideal para decirte: soy Yo 
el que se atrevió a soñar contigo; soy Yo
el que notó tu ausencia; soy Yo
el que se cambió de ruta; soy Yo
el que quiere compartir un café contigo,
tal vez para decir adiós.

¿Tienes tiempo para un café?


MUJER


En un instante mujer,
recorres mis sentidos escarpados,
dibujando emociones con letras de canciones
de tiempos dormidos, de sentidos encriptados
en susurros olvidados de mis labios sellados. 

En un instante mujer,
te escapas del encierro
desatando el infierno atormentado
de recuerdos celestiales, de melodías irreales,
de inframundos que se esconden del sol,
escapando del miedo al dolor.

En un instante mujer,
me traes de vuelta a la vida
en un soplo de placer,
envuelto en los brazos de un ayer
que creí perdido en el abismo del no Ser.

jueves, 14 de noviembre de 2013

“THE WAKING DEAD”



Mi hijo Georg, como cientos de miles, “peinan la muñeca” con esto de los zombis, de hecho, la foto que encabeza este crónica es la de su perfil en Facebook, y entonces pienso: ¿desde cuándo la humanidad viene “rayando la papa” con esta tontera de los muertos vivientes? La verdad es que estas historias me acompañan desde la niñez, por lo que podemos decir que son… muchos años.




Desde que George A. Romero, este cineasta neoyorkino se pusiera de cabeza a revivir cuanto muerto podía para ponerlos en sus películas, las que ofrecían una crítica sobre varios aspectos de la sociedad contemporánea, hasta las más recientes, donde destaca la saga de “Residente Evil” y “Guerra mundial Z”, me pregunto cuál es el mensaje que estamos tratando de interpretar en estas grotescas imágenes de “come cerebros”, y la verdad que no es fácil dar con la respuesta.
Debo reconocer que fue con la última cinta, la protagonizada por Brad Pit, y esta suerte de “inmunizarse” al contagio, contrayendo un virus que no nos permitía “incubar” esta “enfermedad” de los tiempos desatada por las emociones negativas que se exacerban con esta prisa que nos entró con los avances tecnológicos, que nos tiene a todos corriendo como locos sin saber hacia dónde corremos, acumulando una riqueza sin sentido, desatando las tempestades de iras y sentimientos de fracasos continuos y permanentes que despiertan estas “ansias” de querer “comernos” a los demás: “comernos” esta realidad que hemos creado. Si asumimos que todo lo que ocurre en el “escenario” de la vida, todo movimiento frente a nuestros ojos, ocurre desde el interior del Ser, y como no nos hacemos 100% responsable de ello que se traduciría en “viajar” hacia el interior, al subconsciente, donde reside el origen de la tragedia que se está manifestando “allá afuera”, entonces decidimos “comernos” esta realidad que no nos gusta.



“The Waking Dead” es un intento desesperado de la consciencia colectiva para que comprendamos que nos hemos transformado en muertos vivientes. Vivimos una vida muerta ¿Cómo es esto? ¿Cómo podría estar una vida muerta? Sé que suena paradójico, pero ya no tanto cuando comprendo la ilusión que crean nuestros recuerdos emocionales negativos como la codicia, el dolor, el sufrimiento, la violencia, y que a través de éstos enjuicio la realidad que observo, por lo tanto ésta se transforma en un espejo que refleja mi interior, y si a estos los llamamos recuerdos, es porque ocurrieron en un tiempo que ya no existe, por lo tanto es un tiempo muerto, una emoción muerta, lo mismo que ese recuerdo, y si insisto en “ver” a través de aquellas memorias, entonces estoy viviendo una vida muerta. Soy un muerto viviente. Sólo saliendo de aquel “cajón” de emociones muertas me permitiré vivir la VIDA. ¿Cómo sé todo esto? Porque, por muchos años, fui un muerto viviente.

martes, 12 de noviembre de 2013

SUSTENTABLE

Con la campaña de Alfredo Sfeir Younis, me he dado cuenta que muchos colegas periodistas no tienen ni remota idea de qué se habla cuando escuchan el término: SUSTENTABLE. Para hacer el ejercicio, pregúntense a sí mismo ¿qué se yo de sustentabilidad? Se pueden asombrar con la respuesta. Puede ser que sepa mucho, como también es válido que sepa NADA. Le propongo un ejercicio para aprender qué es: sostenga un vaso con agua y obsérvelo y pregúntese ¿qué sé del agua? Básicamente que es un recurso natural vital para la vida humana. Conserve ese vaso en su mano y observe la actividad económica que se produce a su alrededor. Si es del norte, lo más probable que ésta esté relacionada con la minería, la que necesita de muchísima agua para su desarrollo, entonces el vaso en su mano comenzará a estar vacío, cada vez más; si está en el sur, probablemente dicha actividad será la re-forestación con Eucaliptos, en desmedro del Bosque Nativo. Para desarrollar esta economía, por lo rápido del crecimiento del Eucaliptos, comprometemos todas las napas de agua subterráneas, con lo que avanza la desertificación y mi vaso entonces quedará vacío, amenazando no sólo mi existencia sino la de mis hijos y la de los hijos de mis hijos. Crecer de manera sustentable es producir actividad económica limpia y amigable con el medio ambiente, que no afecte esos recursos naturales vitales para nuestra existencia. Esto es de lo que habla Alfredo Sfeir, y no podemos entenderlo si no lo miramos a través de nuestro espíritu, porque allí residen el amor y la paz, valores del alma que de estar presentes en la construcción de la realidad ¡jamás le habrían permitido a la codicia, que nace del Ego, producir a costa de "secar" mi planeta, mi mundo, mi vida! Por eso voto en conciencia, por eso voto Sfeir. Marque, sin miedo; marque con amor, por su mundo, por el de sus hijos... MARQUE 8. GRACIAS.